Hace ya un par de meses he comentado que me he vuelto un tanto determinista... que no puedo creer que tengamos tanta libertad y que ella es más aparente que real... que la que tiene libertad es nuestra alma, pero está atrapada en este cuerpo que no la entiende y que no descifra sus designios... he llegado a decir que si se cree en el Dios de Cristianos y Judíos (el del antiguo testamento, el "real"... no se puede ser sino determinista. No se podría entender que un Dios duro, castigador, omnipotente y fuerte... pueda entregar libertad total... no me parece posible... en fin, a propósito de eso encontré en otro libro algo que puede ilustrar muy bien este determinismo del que hablo.
Leyenda de la cita en Samarra
"Por casualidad, un criado oyó en la plaza del mercado que la muerte lo estaba buscando. Volvió a casa corriendo y dijo a su amo que debía huir a la vecina población de Samarra para que la parca no lo encontrara.
Esa noche, después de al cena, llamaron a la puerta. Abrió el amo y encontró a la muerte, con su larga túnica y su capucha negras. La muerte preguntó por el criado.
Está enfermo y en cama, se apresuró a mentir el amo. Está tan enfermo que nadie debe molestarlo.
¡Qué raro!, comentó la muerte. Seguramente se ha equivocado de sitio pues hoy, a medianoche, tenía una cita con él en Samarra".
Nadie podrá escapar a su destino?
Sigo en la búsqueda!!?